En la actualidad, pedir un préstamo es una de las actuaciones más temidas de los españoles. De hecho, un 74 % considera que solicitar financiación es un asunto arriesgado. Especialmente, los intereses es lo que más nos preocupa a las chicas. Por otro lado, las cláusulas abusivas de la etapa crediticia anterior también han ayudado a crear una situación general de descontento.
Sin embargo, solicitar un préstamo resulta, hoy por hoy, imprescindible para hacer frente al desarrollo personal y familiar. No en vano, la financiación sigue siendo la única opción para conseguir una vivienda o hacer frente a un plan de estudios universitarios. Eso sí, el endurecimiento de las condiciones para acceder a liquidez inmediata ha sido notable.
Al hilo de lo anterior, un 36 % de los españoles considera que la letra pequeña sigue estando presente en los productos de financiación y más de un 48 % solo confía en su tarjeta de crédito para conseguir dinero y no sobreendeudarse.
Consejos para solicitar un préstamo
Si necesitas solicitar un crédito, puedes obtenerlo sin problemas siempre que tu solvencia no se haya visto afectada. Simplemente debes asegurarte de entender bien las condiciones del producto de financiación de tu preferencia.
Estimar de forma realista la capacidad de devolución
Muchos destinatarios de financiación solicitan esta sin tener en cuenta sus verdaderas posibilidades de reembolsar el dinero solicitado. Por ello, debes analizar con precisión tu liquidez a medio plazo, ya que el impago de las mensualidades asociadas al crédito puede acarrear la aplicación de intereses de demora.
Pide solo el dinero que necesites
En la etapa crediticia anterior era muy frecuente solicitar más dinero de la cantidad requerida para gastarlo sin un propósito concreto. No nos engañemos: si ya resulta difícil afrontar los pagos fraccionados de un vehículo, por ejemplo, lo será mucho más si la cantidad de devolver es mayor.
Comparar entre varias alternativas
Cada producto de financiación lleva asociadas unas condiciones específicas que determinarán su coste final. Pues bien, lo mejor que puedes hacer para decantarte por el más ventajoso es crear una lista con todos los créditos revisados en la que indiques la cuantía total a devolver.
Solicitar créditos que se cancelen en el medio plazo
A veces, resulta conveniente no asumir obligaciones de pago más allá de las estrictamente necesarias, como la hipoteca o el coche. Llegar a fin de mes con la carga adicional de la mensualidad de un préstamo personal puede resultar mucho más difícil.
Ventajas de solicitar solo el dinero necesario
Cuando pones en práctica nuestros consejos, solicitar un crédito no es una actividad tan arriesgado. Si necesitas financiación, no dudes en solicitarla; hacerlo con sentido común tiene las siguientes ventajas:
– Un desarrollo sostenible de la economía familiar.
– Desahogo financiero ante imprevistos.
– Capacidad de crédito asegurada. Las entidades financieras prefieren clientes con un perfil de deuda baja.
– Posibilidad de asumir más gastos fijos.
En definitiva, si necesitas pedir un préstamo, valora todos los puntos indicados con anterioridad y asegúrate de que está dentro de tus posibilidades asumir un mayor nivel de deuda. Si tienes algún consejo de interés, puedes compartirlo con nosotras en los comentarios.